Pide cita ahora

La dependencia emocional en la pareja

27 de noviembre de 2018
Dependencia emocional en la pareja

Las relaciones afectivas tienen una importancia trascendental para el bienestar de las personas. Estas relaciones por lo común nos producen emociones placenteras y nos causan sensaciones protectoras, satisfactorias y gratificantes.

En el funcionamiento de la pareja se establecen habitualmente acuerdos de exclusividad como compromiso implícito de la relación, entre los que la fidelidad es uno de los más comunes y ampliamente compartidos. En el vínculo de la relación amorosa también se da de forma natural una cierta dependencia. En algunas personas, sin embargo, la tendencia a la exclusividad se convierte en sentimientos posesivos, en una preocupación obsesiva, y se llega a considerar al otro como una propiedad privada, exigiéndole que esté a nuestra disposición de forma absoluta tanto física como afectivamente. Asimismo, los vínculos de correspondencia y conformidad se suplantan por la necesidad de percibir en todo momento una cercanía afectiva intensa, sin la cual la persona se siente insegura o desprotegida.  Estos síntomas revelan una dependencia emocional.

La dependencia emocional es una necesidad patológica del otro. (J.L.Sangrador. 1998). Se considera que la necesidad del otro es patológica cuando se trata de un impulso desmesurado hacia el objeto del deseo y existe una demanda incesante de manifestaciones de afecto, actitudes de apoyo o cualquier demostración que satisfaga y afirme la personalidad o contribuya al equilibrio individual.

Las personas con dependencia emocional tienen miedo a la soledad, sienten pánico o temor al vacío que supone no tener ni sentir a la otra persona a su lado. También son incapaces de establecer relaciones afectivas sanas, equilibradas y satisfactorias. Psicológicamente son personas con una inmadurez afectiva, vulnerables, con una autoestima débil y fragilidad emocional. Jorge Castelló (2010) refiere que son personas inseguras de sí mismas que basan su valía en ser queridas, se enamoran fácilmente, viven altibajos emocionales intensos, idealizan a su pareja y demandan excesivamente su presencia, contacto, atención y afecto. Otra característica que define a las personas con dependencia emocional es que a lo largo de sus diferentes relaciones de pareja repiten el mismo patrón de conducta.

La vida la persona dependiente gira en gran parte en torno al amor. Sus relaciones de pareja se fundamentan en el paradigma del amor romántico y tienen un modelo de afectividad que gravita en torno a ideas como que el amor verdadero dura para siempre, que solamente existe una persona en el mundo perfecta para nosotros, o que lo celos son garantía de amor.

La satisfacción de las necesidades de la pareja en cuanto a cuidado, intimidad y seguridad deja de ser una condición natural debido a la excarcelación de los sentimientos. En lugar de fomentar en la relación amorosa la igualdad, la confianza, el respeto y la aceptación, la persona dependiente usará a su pareja para intentar satisfacer una necesidad de afecto que al mismo tiempo le esclaviza. Por esto, cuanto más dependiente se sienten del amor del otro, más se siente amenazada por su falta.

Este tipo de relaciones generan una gran ansiedad no solo a la persona dependiente sino también al otro miembro de la pareja y provocan dinámicas nocivas en la relación que terminan por destruir la pareja.

En nuestro centro de psicología en León, Ana Hurtado de Mendoza, podemos ayudar a identificar y aliviar la dependencia emocional en parejas e individuales haciendo las relaciones de pareja más placenteras, satisfactorias y gratificantes.

Compartir en:
whatsapp facebook twitter
Financiado por la Unión Europea - NextGenerationEU Financiado por la Unión Europea - NextGenerationEU